Decidí dar un paseo por la ciudad fortificada de Vysehrad en el centro de Praga e inmediatamente hice otro bonito descubrimiento. Caminé desde el metro hasta Vysehrad y en la entrada de la ciudad fortificada encontré inmediatamente un bar pequeño y acogedor, muy bonito.
1. U Vratislava Dirección: V Pevnosti 6, 128 00 Praha 2-Vyšehrad, República Checa
Ya había caminado mucho, así que pensé que era hora de tomar una copa. U Vratislava fue el primer lugar que encontré y al principio ni siquiera me di cuenta de que era un bar. Simplemente pensé que el edificio era acogedor y quería tomarle una foto. Cuando hice la foto y de repente vi en mi objetivo las mesas de la terraza, solo se me ocurrió que también podría tomar una copa aquí. Bueno, entremos. Enseguida me sorprendió la cálida bienvenida del propietario y pedí algo fresco para beber, pensé que era demasiado temprano para tomar un Pivo a la una de la tarde, aunque por supuesto estaba disponible. Me quedé con un refresco, pero por supuesto también puedes conseguir todo tipo de café allí, pero lamentablemente no soy un bebedor de café. Pronto descubrí que también servían un buen almuerzo, cosa que realmente no esperaba desde fuera, dado el tamaño del lugar. El menú del almuerzo era muy extenso con una combinación de especialidades checas y todo tipo de sándwiches. Elegí un hot dog típico checo y sabía muy bien. Nunca había probado un hot dog en Praga a pesar de que es algo que se sirve comúnmente en Praga. Estaba muy sabroso y cubierto con virutas de queso cheddar y cebolla. Además, se permitía una salsa típica checa. Realmente me sorprendió gratamente. El lugar era muy pequeño y acogedor pero tenía mucho ambiente. También me recibieron muy abiertamente, muy recomendable si estás en la zona.
2. U Zavěšenýho Kafe Dirección: Loretánská 179, 118 00 Praha 1-Hradčany, República Checa
No esperaba descubrir otra joya de bar el mismo día. Después de ver Vysehrad decidí visitar también los complejos del castillo. Una vez que vi el castillo, decidí dar un paseo desde el castillo hasta Mala Strana pasando por la colina Petrin porque quería admirar la Torre Petrin en la oscuridad, después de todo, es enorme y está impresionantemente iluminada. Fue una caminata bastante larga cuesta arriba y cuando pasé por U Zavěšenýho Kafe mi primer pensamiento fue seguir adelante porque desde fuera parecía un poco sombrío. Como tenía sed, decidí pasar por aquí para calmar inicialmente mi sed. Pronto se volvió muy agradable entre los lugareños. Cuando respetas a los lugareños, ellos normalmente te respetan y realmente puedes divertirte mucho con ellos. Después de unos Pivo's decidí pedir el menú porque ya eran las siete y media y hora de comer algo. Pedí el gulash, que es una de las especialidades bohemias checas y debo deciros que la comida estuvo realmente estupenda. Aquí también el servicio fue muy amable. Cuando el reloj dio las ocho y media, todavía no tenía ganas de ir, pero de todos modos tenía que terminar mi caminata. Cuando me fui, recibí un bonito recibo escrito a mano y no tuve que pagar quince euros por una buena comida, incluidas tres bebidas, lo que también fue un golpe de suerte económico. Muy recomendable, escondido!
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